- Editorial:
- OCTAEDRO
- Año de edición:
- 2014
- Materia
- Teatro
- ISBN:
- 978-84-941532-2-8
- Páginas:
- 216
- Encuadernación:
- TELA
EL TEATRO JOVEN DE 13 A 16 AÑOS
MANTOVANI GIRIBALDI, ALFREDO
Prólogo: Por una pedagogía de la creatividad, de la ilusión, de la confianza
Presentación
Estructura del libro
Introducción
1. El adolescente y su identidad
2. La enseñanza teatral con jóvenes
3. ¿Cómo se aprende a dirigir?
4. La creación colectiva en el teatro joven
5. La estructura dramática
6. Testimonios de profesores
7. ¡Adaptar! ¡Adaptar! ¡Adaptar!
8. ¿Qué puedo representar con mi alumnado?
9. Alternativas a una obra de teatro
10. Conclusiones
Este libro contiene dos obras de teatro completas para ser representadas:
? Fuenteovejuna (versión)
? ¡Adolescentes!
Tenemos en nuestras manos El teatro joven de 13 a 16 años, un completo recurso que concluye una trilogía pedagógica teatral, justificada y experimentada con un enfoque totalmente educativo y humanista. Como continuación de los dos textos anteriores: El juego dramático de 5 a 9 años y La dramática creativa de 9 a 13 años, escritos conjuntamente con la profesora Rosario Navarro y publicados en esta misma colección, Alfredo Mantovani completa su «sistema de teatro evolutivo por etapas» y corona su larga trayectoria como profesor de teatro con un libro lleno de sugerencias, estructuras y elementos probados para llevar a cabo prácticas artísticas con jóvenes. Entre sus numerosas aportaciones, merecen destacarse los pasos para conseguir una creación colectiva o la adaptación y puesta en escena de una obra teatral, como son una recreación del clásico Fuenteovejuna y una obra inédita titulada Adolescentes. De este modo, el autor cierra un trabajo innovador, fruto de su afán por delimitar un campo específico que necesitaba un marco referencial teórico, con la novedad de considerar a los adolescentes «buscadores de su identidad», que necesitan ser tratados como «comunicadores» más que como actores o actrices.
Sin duda, una obra útil para docentes, profesores de teatro, animadores o monitores, que podrán multiplicar con eficacia las actividades dramáticas en institutos, colegios, escuelas de teatro, clubs de tiempo libre, asociaciones juveniles, centros culturales y allí donde exista un grupo de jóvenes con ganas de expresarse.